
Y después de tanto, tanto camino recorrido, tanto tiempo, tanto amor y tanta consciencia, aún me pasa… me pasa que hay días como hoy, un domingo cualquiera, que me levanto y desde que abro los ojos siento que algo está mal con mi cuerpo, rápidamente me doy cuenta de que este será uno de esos días en los que deberé repetirme una y otra vez que me gusta como soy.
Me levanto temprano como todos los días porque Joaco no nos da tregua. Su deseo de vivir la vida, de gozar y disfrutar cada momento, de descubrir qué tiene el día para ofrecerle empieza a las 5:56 am. Me dice como casi todos los días «mamá despierta, mira que ya salió el sol!» Y es que parece que para él esta es la clave para saber que el día empezó y es hora de vivir!!!! Así que respiro, me estiro, doy gracias porque durmió hasta casi las 6 de la mañana y voy con él a su cuarto, a tratar de estar presente en uno de sus momentos preferidos: jugar con sus juguetes mientras el mundo duerme.
Empiezo a hacer cuentas de a qué horas tengo que bañarme, a qué horas necesito salir de mi casa, si voy a comer algo o no, todo para poder llegar a una invitación que sé que estará llena de amor y buena energía, voy a ir a celebrar la vida y el cumpleaños de una amiga muy pero muy especial para mí. Sigo un poco dormida y continúo sintiéndolo en mi cuerpo, esta sensación que me ha acompañado durante muchos años y que me atormentó profundamente. Es esa sensación la que muchas veces me hizo creer que algo estaba mal conmigo, que no estaba bien ser como era y que debía cambiar. Durante muchos años me debilitó y me avergonzó, hoy sé cómo regresar más rápidamente al amor. Es un sentimiento muy pero muy caprichoso, porque me dice, me muestra, me hace sentir inapropiada, gorda, fea, diferente a las demás. Me hace creer muy fantasiosamente que todas las otras mujeres se sienten perfectamente bien con ellas mismas y yo soy el bicho raro que está mal. Sé que hay amor, pero no lo veo, está muy escondido… ¿o será que por el contrario está ahí muy presente?e no logramos coincidir… cuando lo aprendí fui libre, porque supe que tenía permiso y derecho a sentirme como hoy, pero que también tenía la obligación conmigo misma de recuperar la relación, como lo hago con Lucas, Joaco, mis amig@s, mi familia, cada vez que algo no anda bien…
…
Si quieres seguir reconociendo tu interior para transformar tu vida, continua tu lectura aquí: http://www.amorescaprichosos.co
Y hoy me levanté, sin saber qué ponerme, aunque por una razón hermosa, una barriga gigante con una ilusión y anhelo adentro, pero este post me recordó que muchas veces lo he sentido…
Me gustaMe gusta
Que bonito saber que detrás de todo, siempre siempre está el amor!!!! Gracias por tu comentario, y recuerda que cada miércoles habrá uno nuevo que querrás leer!!!
Me gustaMe gusta
Me ecantó, toca repetirnos más seguido: » me gusta como soy» y enseñarle a los chiquitines a quererse y agradecer que cada ser es único con una magia que la refleja el alma y no el cuerpo!
Me gustaMe gusta
Muy bien! Exactamente! Que esa sea nuestra forma de ver el mundo y que ellos puedan verlo a través de nuestros ojos! Gracias por tu comentario y recuerda que cada miércoles habrá una nueva entrada que querrás leer!
Me gustaMe gusta
Uuuuy tan cierto y tan oportuno. Y me repito muchos días me gusta como soy, sin sonar conformista sino realmente valorando que el como soy me ha permitido estar aquí y que el como soy me ha hecho una gran persona con los momentos difíciles o fáciles.
Me gustaMe gusta
Exacto! Es muy rico conectarse con ese pedazo de ti mism@ que te valora y agradece… que maravilla! Gracias por tu comentario! Y recuerda que cada miércoles habrá una nueva entrada que querrás leer!
Me gustaMe gusta